Un grabado de Gustave Doré representa a Lucifer, que ilustra Canto XXXIV de la Divina Comedia de Dante.
El libro de Apocalipsis está escrito en una especie de código visionario que tiene un montón de descifrar. La clave del código se ha imaginado de manera muy diferente en los siglos. Algunas personas piensan que la revelación se refería a los acontecimientos del momento en que fue escrito, en torno al año 95. Otros piensan que proporciona una cuenta de un símbolo de la historia de la Iglesia durante los últimos 2.000 años. Y otros - una visión particularmente popular en los EE.UU. - creen que es una predicción del futuro y que los acontecimientos mundiales específicos se pueden identificar en sus capítulos.
Una de las imágenes vívidas John utiliza es en el capítulo 13, donde habla de las bestias saliendo del mar y de la tierra. De la segunda bestia, dice que fue "le permitió infundir aliento a la imagen de la primera bestia, para que la imagen hablase e hiciese todo lo que se negaron a adorar la imagen de ser asesinado. También obligó a todas las personas, grandes y pequeños , ricos y pobres, libres y esclavos, se les pusiese una marca en la mano derecha o en la frente, por lo que no podían comprar ni vender, sino el que tuviese la marca, que es el nombre de la bestia o el número de su nombre.
"Aquí hay sabiduría. Deje que la persona que tiene entendimiento, cuente el número de la bestia, pues es número de hombre. Ese número es 666." (Apocalipsis 13: 15-18)
La gente siempre se han preguntado acerca de la "marca de la bestia" y el "número de la bestia". La "marca" en griego es charagma, utilizado para los sellos en documentos o diseños en monedas.Cuando los códigos de barras comenzaron a ser utilizados en los productos, algunas personas pensaron que se trataba de la marca de la bestia. Ahora se está sugiriendo que vamos a hacer transacciones y ser identificados por microchips bajo la piel; de nuevo, algunos han dicho que se trata de la marca de la bestia.No hay nada muy bíblica sobre este tipo de especulación, porque se lo separa del mundo John sabía. Todo lo que sabemos acerca de los profetas indica que Dios habló a través de su propia experiencia y de la reflexión en lugar de dejar caer las ideas directamente a la cabeza. Esto es - como la mayoría de la Revelación - un pasaje misterioso, pero lo más probable es que el charagma era la cabeza del emperador en una moneda. Se puso de esta manera hacerse eco de la orden en Deuteronomio 11:18 "arreglar estas mis palabras en vuestro corazón y las mentes; atarlos como símbolos en las manos y se unen en sus frentes" - una orden observado hoy por Judios que desgaste filacterias. Así que esto se convierte en una advertencia de la potencia de un sistema económico y político ateo que trata de dominar a todos.
Y ¿qué pasa con el número de la bestia, 666? De nuevo, esto se ha interpretado en todo tipo de formas. A veces se identifica con la marca, pero parece ser diferente.
El candidato más probable es el emperador Nerón. Jimmy Akin tiene una buena explicación de esto.En el Nuevo Testamento griego, el idioma de la Revelación, las letras del alfabeto se duplicaron como números. Los primeros nueve letras del alfabeto reposar durante una a nueve, el siguiente como el 10-90 y así sucesivamente.
Todo lo que Juan dice acerca de la bestia apunta a una asociación con Roma y el Imperio Romano. En arameo, Nerón César se habría pronunciado algo como Neron Qaisar. Y si se utiliza el sistema de numeración arameo, que funciona como el griego, el número de Nerón se suma a 666.
Por otra parte, si se olvida de la última N en Neron - una ortografía alternativa - se obtiene un valor numérico de 616. Algunos manuscritos griegos tempranos dan el número de la bestia como 616.
Todo esto suena muy convincente, aunque vale la pena señalar que Ireneo, que escribió en un siglo de Juan, no menciona Nero como candidato.
Pero si era Nerón, ¿qué dice esto a la Iglesia hoy?
Es otra manera de advertencia sobre el poder de un Estado que se opone a Dios. La Biblia es ambigua sobre el estado. En Romanos 13 Pablo dice: "Que cada uno se someta a las autoridades públicas, pues no hay autoridad sino de lo que Dios ha establecido." Pero en Apocalipsis - escrito en el contexto de la persecución de Nerón, cuando las calles de Roma se encendieron por los cuerpos de los cristianos ser quemado vivo por su fe - el estado es una bestia voraz. Es un dragón; se trata de "Babilonia la grande, la madre de las prostitutas y de las abominaciones de la tierra" (17: 5).
Es probable que Juan tenía un individuo en particular en mente como la bestia. En nuestro tiempo la gente lo han identificado con Hitler y Stalin. Pero si nos limitamos a la bestia a un individuo que probablemente estamos perdiendo algo importante: el mal no es sólo personal, es corporativo y político.Si aun la moneda que utilizamos para comprar comida y pagar nuestras cuentas con está contaminada, nos encontramos con que todo lo penetra mal.
La reacción de algunos cristianos a vivir en un estado comprometido es retirarse de él y lo ven como el enemigo. Pero esto es sólo una manera de ver las cosas; Paul es mucho más positiva. El profeta Jeremías dice a los exiliados de Jerusalén a "buscar el bienestar de la ciudad adonde os he desterrado, y orar al Señor en su nombre, porque en su bienestar se encuentra su bienestar" (29: 7).
Pero el mensaje de Apocalipsis es claro: el Estado es también Babilonia. Podríamos gusta vivir en nuestro propio país e incluso ser patrióticamente orgulloso de ello, pero nuestra verdadera ciudadanía está en los cielos.
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